Мовна специфіка літературних творів доби Золотого Віку

Дипломная работа - Иностранные языки

Другие дипломы по предмету Иностранные языки

in conocemos que el sujeto desea efectivamente al objeto, o por lo menos que el sujeto puede desearlo en caso de que est convencido de la noexistencia del objeto. Es decir, una cosa es valiosa no slo cuando es capaz de producir un sentimiento de agrado, pues en ese caso seran valiosas slo las cosas existentes. Valoramos tambin lo que no existe como la justicia y la bondad perfectas. Por tanto, el fundamento del valor no se encuentra en el sentimiento de placer o agrado como sostiene Meignon, sino en el apetito o deseo: las cosas son valiosas porque de no existir o de no poseerlas, las desearamos. Cuando hay una representacin fuerte y completa del ser del objeto, entonces la relacin sujeto - objeto despierta en nosotros un estado sentimental ms intenso que la representacin de la noexistencia de ese mismo objeto. Valor es siempre la relacin entre un objeto y la disposicin de apetencia de un sujeto.

2.2. El subjetivismo axiolgico

 

Se trata de la negacin del carcter absoluto del valor, como independiente del sujeto. Esta postura se despliega sobre todo en Europa a partir de bajo el signo de relativismo histrico: la historia es la fuerza productiva que engendra los valores con los que se mide el significado de hombres y pocas. Tambin G. Simmel se pronuncia en el sentido de Dilthey: el valor nunca es una entidad objetiva, pues su objetividad resulta de la correlacin entre sujeto y objeto. Los valores absolutos son los que los hombres reconocen como tales en determinadas condiciones. No muy lejos de esta postura se halla el relativismo sociolgico de A. Vierkandt.

Tambin aparece esta postura como relativismo monistanaturalista en W.Ostwald. La realidad es la energa, entendida sta como una verdadera causa y como constante ontolgica que continuamente se modifica. Las realidades particulares son modos de energa, la cual es siempre constante. La energa es un valor. Esta teora, conocida con el nombre de energetismo ensea el imperativo energtico: no desperdiciar la energa libre que disminuye constantemente, sino aprovecharla. Slo es valioso lo que contribuye a ese aprovechamiento. El mximo valor consistir en el mximo aprovechamiento de energa.

Tambin H. Aifinsterberg profesa el relativismo. La filosofa se basa en un acto voluntario fundamental que afirma la existencia del mundo. Este acto afirmativo es el fundamento de un sistema de valores. Los valores son el resultado de una accin libre de afirmacin, pero que se establecen independientemente organizados en una jerarqua. El valor puede originarse o bien de la vida espontnea o bien de la vida consciente. En ltimo anlisis, todos los valores se resuelven en una unidad suprema: el mundo como producto de una voluntad de valores. Pero quiz las formas ms radicales de subjetivismo se han dado en el mbito anglosajn. Cuando ya pareca que el subjetivismo haba sido completamente superado en el mbito europeo, floreca en los crculos filosficos anglosajones. Esto fue debido a que el idealismo de corte germnico de un Bradley o de un Royce jams lleg a cuajar definitivamente. Era demasiado intensa la influencia de la tradicin empirista y nominalista de Ockham, Bacon, Hume, Mill, para que el idealismo pudiera establecerse tranquilamente. Surge entonces el neopositivismo con una fuerte afirmacin de pragmatismo. R. B. Perry, Wittgenstein, R. Camap, A. Ayer y B. Russell encabezarn este movimiento.

R. B. Perry rechaz acertadamente la tesis idealista, pero sostuvo la teora extrema del subjetivismo axiolgico: el fundamento del valor es el sujeto que valora. Hay una relacin estrecha entre el valor y el inters, de modo que un objeto adquiere valor cuando se le presta inters. Los objetos, dice, no tienen previamente una determinada cualidad para ser valiosos; ni tampoco existen nicamente intereses especiales que confieran valor al objeto: cualquier inters otorga valor al objeto. Se puede establecer la siguiente ecuacin: x es valioso=se ha tomado inters en x. El inters expresa una actitud compleja de todo ser vivo de estar a favor o en contra de ciertas cosas. Inters es el deseo, el agrado, la voluntad, el propsito, la aversin, etc. Por tanto, son marginadas en esta teora las cualidades del objeto que despiertan en nosotros el agrado o el desagrado. El silencio del desierto carece de valor hasta el momento que algn viajero lo encuentra desolado y aterrador; lo mismo sucede con la catarata hasta que una sensibilidad humana la encuentra sublime.

Otra forma de subjetivismo axiolgico, aunque no coincidente con el anterior, es la del empirismo lgico. El Tractatus LogicoPhilosophicus de Wingenstein puede tomarse como punto de partida (1921) del empirism lgico.

Un primer ncleo de este movimiento qued constituido en el Crculo de Viena, encabezado por Moritz Schlick. El Crculo de Viena se propuso unificar las ciencias, incluida la filosofa, partiendo del mtodo lgico de anlisis, el cual permitira eliminar problemas metafsicos y afirmaciones carentes de significacin; este mtodo servira para aclarar los conceptos y las proposiciones de las ciencias empricas, cuyo contenido es lo observable de modo inmediato.

Las expresiones metafsicas, afirman, tienen un trasfondo sentimental, careciendo de rango cientfico. Los predicados bueno, bello, justo, etc., como valores, no tienen funcin simblica como la tienen los predicados rojo, fro, idiota, etc., sino que sirven slo como signos emotivos o expresiones de nuestra actitud hacia algo. Cuando decimos bueno no afirmamos nada del objeto, pero manifestamos nuestro estado sentimental. Y no es que nuestro deseo o agrado confiera valor al objeto como crea Meignon, sino que cometemos un error creyendo que hablamos de un objeto, cuando en realidad hablamos de un estado sentimental. Para R. Carnap (v.), p. ej., los juicios de valor son disfraces de imperativos o normas. Entre el juicio de valor robar es malo y el imperativo no robes slo hay diferencia de formulacin, mas no de contenido. Pero, por. otra parte, la norma o imperativo no afirma nada, sino que expresa un deseo; por tanto, es intil agotar argumentos para probar su verdad o falsedad: tanto el juicio de valor como el imperativo o norma no son ni verdaderos ni falsos. La axiologa, como ciencia, jams podr constituirse sobre tan efmera base, pues sus juicios no son verificables, careciendo as de significado.

Parecida postura mantiene Ayer. Ahora bien, un sentimiento puede ser expresado o afirmado; no es lo mismo afirmar que expresar un sentimiento. As, la enunciacin de un juicio tico no es afirmacin, sino expresin de un sentimiento, lo cual, a su vez, ni es verdadera ni falsa. El subjetivismo desconoce esta distincin, ya que el juicio de valor no sera ms que la afirmacin de la existencia de un sentimiento. Pero en tal caso el juicio es verdadero o falso: o es cierto o no que el sujeto tiene el sentimiento que afirma. Decir que una cosa es buena o correcta no equivale a decir que merece la aprobacin general, ya que se aprueban muchas acciones malas o incorrectas. El hombre que aprueba lo malo no se contradice. Entonces, si un juicio de valor no implica una proposicin o afirmacin jams habr proposiciones axiolgicas contradictorias. nicamente cabe la posibilidad de juicios de valor si previamente admitimos todos una tabla de valores. Con arreglo a esa tabla se podr discutir ulteriormente si un hecho encaja o no en su mbito. Pero quien no est de acuerdo con nuestra tabla de valores jams podr ser convencido de la verdad o falsedad de su postura. Al no poderse determinar la falsedad o verdad de los juicios de valor ya que no afirman nada, debemos concluir que no significan nada. La tica no tiene posibilidad alguna. Slo la Psicologa estudiar las reacciones y sentimientos que tales juicios expresan o provocan.

En esto coincide con Ayer B. Russell, ya que la cuestin de los valores est fuera del dominio del conocimiento, siendo adems mera expresin de nuestros sentimientos. La idea de lo bueno y de lo malo est conectada siempre al deseo (bueno=deseado; malo=evitado). La tica quiere dar significacin universal a ciertos deseos personales. Ahora bien, decir esto es bueno no es lo mismo que decir esto es cuadrado. Con el predicado bueno se enuncia slo un deseo; mientras que con el predicado cuadrado se enuncia algo objetivo. Jams podr discutirse sobre la verdad o la falsedad del predicado bueno. Russell (v.) afirma expresamente que su doctrina es una forma de la subjetividad de los valores. Para l no es posible encontrar argumentos para probar que algo tenga un valor intrnseco. No obstante, parece contradecirse en su postura, cuando afirma que nuestra vida tiene que guiarse por grandes deseos impersonales y .generosos. Pero esto es ya postular una escala objetiva de valores, de modo que el hombre tiene que obrar por razn de los ms altos jerrquicamente.

 

2.3. El objetivismo axiolgico

 

Al despertar el idealis